Como ya hemos mencionado con
anterioridad los conflictos son algo inevitable en cualquiera de los ámbitos donde
generalmente interactuamos con las demás personas y nuestra familia no se
escapa de ellos sobre todo cuando más de una persona interviene en la toma de
una decisión de ahí que lo mas importantes en primer lugar es saber escuchar a
los demás con respeto entendiendo su posición y generando empatía, más aun si
se trata de nuestros hijos.
Cuando un niño aprende a
llevarse bien con los demás tanto en los momentos de acuerdo como en los de desacuerdo,
adquiere la capacidad de ponerse en el lugar de la otra persona y por los tanto
a ser un buen conciliador.
Si existe una persona con la
capacidad de conciliar en una familia se evitaran menos roces y más acuerdos, lo
que contribuirá en una mayor armonía no solo con su familia sino con todas las personas con las que nos relacionemos.
Para esto algunos concejitos
que nos permitan reflexionar y a la vez
nos sirvan para poner en práctica al interior de cada una de nuestras familias.
ü De
ejemplo de maneras apropiadas de resolver los conflictos, sin violencia
ü No emplee
agresión física ni verbal para controlar a los niños
ü Enseñe
a sus hijos a controlar la ira
ü Haga
reuniones familiares regularmente para discutir las decisiones que se toman
ü No resuelva
ni intervenga en los conflictos de sus hijos, ellos deben aprender a manejarlos
y encontrar una solución
ü Supervise
la televisión, este medio es el que más ejemplos inapropiados da de manejo de
conflictos
ü Enseñe
a sus hijos el arte de la negociación
Los padres de familia al
igual que los educadores están llamados a adquirir los conocimientos, las herramientas
y las estrategias que les permitan guiar, acompañar y estimular permanentemente
el desarrollo y crecimiento de sus hijos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario